Es originaria de Arica, al norte de Chile, y proviene de una familia marcada por la resiliencia y el valor de la comunidad. Desde su infancia, aprendió a amar la naturaleza y el trabajo en equipo al formar parte del grupo scout Pukará, experiencia que le inculcó el cuidado del medio ambiente y el aporte de acciones concretas en beneficio de los demás. Su carácter proactivo y social la llevó siempre a buscar su superación, comprendiendo que la verdadera satisfacción no solo reside en el progreso personal, sino en ayudar a que otras personas también puedan crecer.

Ese camino lo ha encontrado en la cultura. A través de su participación en la Agrupación Arica Urbano, ha aportado en distintos procesos de gestión cultural en su región. Ha formado parte de actividades comunitarias y proyectos emblemáticos que integran la música, la artesanía y el arte urbano como herramientas de encuentro, educación y transformación social, siempre con el objetivo de fortalecer el tejido cultural y comunitario de Arica y Parinacota.

Su trayectoria incluye una formación continua en gestión cultural, proyectos comunitarios y curaduría artística, ampliando sus herramientas como lideresa. En su desarrollo personal, también explora nuevas formas de expresión, con la creación de sus primeras canciones y el aprendizaje del break dance, lo que le permite conectar de manera más profunda con las juventudes y con quienes comparten la pasión por la cultura urbana.

Es madre de dos hijos, emprendedora y gestora cultural afrodescendiente chilena. En todo lo que realiza, reconoce la mano de Dios: en sus logros, en sus luchas y en la fuerza que la impulsa a seguir adelante. Para ella, dar gloria a Dios no es solo una frase, sino un sentimiento que la acompaña cada día y que la motiva a servir con amor. Su invitación es a vivir la cultura con esperanza, a ser buenas personas y a construir juntos una sociedad más justa y luminosa.