El arte siembra conciencia y acompañar a lxs jóvenes para elegir ser vida en este sistema de muerte, es un acto político.
Pintora, soñadora y andariega. Tiene su raíz en la Sierra de Guerrero (México) donde la comunidad le ha enseñado sobre la relación con la Tierra, los cuidados colectivos y la resiliencia. Proveniente de una familia campesina, tianguera y abarrotera, es la primera mujer en decidir sobre como andar su camino, ser abiertamente cuir y construir una vida más libre y tranquila.
Es fundadora del proyecto artístico-educativo "Acuerparte", desde donde busca visibilizar corporalidades, erotismos e identidades diversas, encontrando a la Tierra en el cuerpo y la disidencia sexo-genérica como resistencia y orgullo.
Forma parte del "Colectivo Biocultural Quiote", dedicado a reconstruir la memoria ancestral de Xiquipilli, a través del arte colectivo y a regenerar espacios silvestres de forma lúdica.
Ha sido gestora cultural impulsando talleres como “Vulvarte”, espacios de justicia económica para artistas como el “Bazar Disidente”, y murales colectivos en distintos territorios de Abya Yala. También ha colaborado en la producción audiovisual por la justicia socioambiental frente al extractivismo minero y la turistificación que afectan diversos pueblos de Abya Yala.
Actualmente escribe “Memorias de Amapola”, una antología sobre historias de resistencia en la Sierra de Guerrero, uno de los territorios más golpeados por la violencia del narco-estado en México, recuperando las voces de sus familiares y anónimos que sostienen la vida; colabora como diseñadora creativa en el Grupo de Financiamiento Climático para América Latina y el Caribe, le gusta tenderse en las calles a vender su arte y salir a correr al monte.
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